Un "agente comercial" es un autónomo por cuenta propia, que trabaja para empresas vendiendo sus productos y servicios a sus clientes a cambio de una comisión sobre las ventas realizadas.
Los agentes no son empleados asalariados sino comerciales autónomos. Por lo general en todo momento suelen trabajar con varias empresas a la vez. Con estas empresas, llamadas “Principales” o "Mandantes" en términos legales, suelen forjar una estrecha relación, trabajando en asociación con ellos.
Sin embargo, los agentes comerciales rara vez dedican toda su labor exclusivamente a un sólo mandante, ya que las comisiones que le genera de forma individual no suelen ser suficientes para hacerlo. En base a esta explicación puede afirmarse que los mandantes son importantes para el agente comercial, pero mucho más lo son sus clientes. Por lo tanto en la práctica más que una “contratación” de agentes comerciales la relación se debe enfocar como una “colaboración” con ellos.
¿Cómo operan los agentes comerciales?
Con muchas excepciones a la regla, se pueden admitir algunas características comunes a todos ellos:
Cuentan con una cartera de alrededor de 3 a 6 productos o servicios
- Cubren un territorio aproximado de varias provincias
- Tienen una red establecida de clientes
- Trabajan únicamente a comisión, un porcentaje del valor neto de las ventas
- No compran material, ni lo transportan, entregan o cobran.
- No realizan labores de Distribuidor / Importador